Las mejores recetas de Casa Cuti

Esta página no pretende ser un curso de cocina. Nuestra intención es compartir con todos vosotros nuestros platos favoritos, lo que comemos cada día... Leer más...

Toni, Rosana y Alba...
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lunes, 29 de agosto de 2011

- Sardinas con Tomate -

Este es un sencillo plato que no requiere de mucha explicación. Sin embargo es una manera muy buena de comer las sardinas y una combinación excelente. Yo personalmente las prefiero hacer limpias pero enteras. Sin embargo, si lo prefieres puedes eliminar también la espina central y hacerlas abiertas para no tener que "entretenerte" cuando las comas. Además, si las acompañamos de unos pimientos de padrón es difícil resistirse.

Ingredientes para 2 personas:
  • 6 a 10 sardinas
  • 12 pimientos de Padrón
  • 2-4 tomates
  • 1 cebolla pequeña
  • 1 diente de ajo
  • 1 cucharadita de azúcar
  • Aceite de oliva para freír
  • Sal fina y sal gruesa
  • Harina para rebozar

Preparación:

Limpia bien de escamas las sardinas. Retira la cabeza y tripas para dejarlas bien limpias. Echa sal por las dos partes de las sardinas, enharínalas y espolsa la harina sobrante dándoles unos golpecitos con las manos. Fríelas en abundante aceite de oliva unos 2 minutos por cada lado. Retira y escurre bien el aceite colocándolas sobre papel absorbente. Puedes aprovechar el aceite para freír los pimientitos de padrón, a fuego moderado para que se hagan lentamente. 
Mientras tanto puedes ir haciendo la salsa de tomate. Si usas salsa enlatada ya preparada te ahorrarás estos pasos. Si quieres hacerla tú mismo pica muy fino la cebolla y el ajo y rehógalos en una cazuela con un fondo de aceite. Tritura el tomate utilizando un rallador y añádelo a la cebolla cuando ésta esté tomando color. Agrega una cucharadita de azúcar para corregir la acidez del tomate y deja cocer a fuego lento unos 15 minutos, removiendo de vez en cuando. Rectifica de sal y añade las sardinas ya fritas en el tomate. Deja cocer unos minutos más para que se impregnen bien. Sirve en una fuente acompañados de los pimientos de padrón a los que puedes echar un poco de sal gruesa.

Apuntes:
  • Una salsa de tomate casera siempre queda mejor. Sin embargo, para ahorrar tiempo puedes utiliza alguna salsa ya preparada de las que venden en conserva. El resultado también será muy bueno..
  • Si lo prefieres puedes utilizar pimientos italianos verdes en la propia salsa de tomate en lugar de usar los pimientos de padrón. Sofríelos junto a la cebolla cortados en trozos medianos y agrega luego el tomate. Quedará todo integrado.

    martes, 16 de agosto de 2011

    - Aguacate y Melón con Salmón -

    No soy muy aficionado al aguacate. De hecho podría asegurar que no me gusta. Pero si lo camuflo no tengo motivo alguno para no comerlo. En este caso el melón y el salmón lo hacen estupendamente, y la combinación de todo es espectacular. Os puedo asegurar que es más fácil hacerlo que comerlo luego.

    Ingredientes para 2 personas:
    • 1 aguacate
    • 1 Melón Cantaloupe/Cantaloup/Cantalupo pequeño (realmente sólo hace falta un trozo)
    • 1 Queso fresco de burgos
    • 2 lonchas de salmón ahumado
    • 1 limón pequeño (la piel y su zumo)
    • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
    • Sal
    • Pimienta Blanca Molida

    Preparación:

    Parte el aguacate por la mitad, retira el hueso y pélalo. Puedes hacerlo fácilmente tirando con los dedos. Con ayuda de un cuchillo afilado, corta en lonchas gruesas la pulpa, colócalas en un bol pequeño y rocía con el zumo de medio limón para que no se oxide y se ennegrezca. A continuación corta el melón en rodajas y quita la piel y semillas, cortando trozos más o menos del tamaño de las rodajas del aguacate. 
    Corta el queso también en rodajas y el salmón en lonchas, tantas como trozos de aguacate y melón.
    En un bol prepara un aliño con el aceite, el zumo de lo otra mitad del limón, una cucharada  de ralladura de su piel, la pimienta y una pizca de sal.
    Coloca juntos un trozo de aguacate y uno de melón, envuelve más o menos con una loncha de salmón y dispón sobre un trozo de queso. Rocía el aliño por encima y tendrás una estupenda ensalada.

    Apuntes:
    • Puedes prescindir del aliño si lo deseas, quedando más suave y muy buena también. De esta forma, una vez montados los trozos, espolvorea con la ralladura del limón y un poco de pimienta blanca molida por encima para resaltar el sabor del melón.
    • Si lo prefieres utiliza lima en lugar de limón. Le dará un toque más ácido.

      lunes, 15 de agosto de 2011

      - Pollo con Manzana y Soja -

      No sabía muy bien cómo gastar un poco de salsa de soja que tenía por la nevera y rebuscando me encontré con todos estos ingredientes. Probando a ver qué tal quedaban, y con el vago recuerdo de haber oído en alguna ocasión sobre una salsa de cebolla con manzana, me encontré con un bocado exquisito. Al final me acordé quien me habló sobre esta receta, así que mi "invención" quedó en un recuerdo anterior de una conversación con Esther y Mariano contándome lo que iban a cenar. ¡Gracias chicos! Realmente quedó muy buena, aunque no sé muy bien si fue así como la hicisteis vosotros.

      Ingredientes para 2 personas:
      • 1 pechuga de pollo
      • 1 cebolla
      • 1 manzana
      • Salsa de soja
      • Sal
      • Aceite de Oliva virgen Extra

      Preparación:

      Pela la cebolla y quita la primera capa. Pícala muy fina, ayudándote de una picadora si es posible, pero con una velocidad baja y poco tiempo para que no se haga excesivamente líquida. Ponla a pochar en una sartén con 2 cucharadas de aceite y un poco de sal, ne demasiada ya que la soja ya tiene sal. Mientras se va pochando a fuego lento pela y pica muy fina la manzana. Cuando la cebolla comience a tomar color añade la manzana y rehoga unos minutos hasta que pierda el agua. Añade entonces la pechuga de pollo cortada en dados pequeños y saltea todo junto unos minutos.  En el momento que la pechuga esté hecha incorpora un buen chorro de salsa de soja y deja reducir. Sirve acompañada de una ensalada de lechugas variadas.

          domingo, 7 de agosto de 2011

          - Milhojas de Patata con Espinacas -

          Hoy aprieta con ganas el calor, y la verdad es que no me apetecía nada encender el horno. Sin embargo, dada la sencillez de esta receta, he dejado atrás la pereza y me he puesto manos a la obra. Además, aprovechando el horno he hecho de segundo unas albóndigas al horno con una salsa de tomate que ha completado perfectamente el menú.

          Ingredientes para 2 personas:
          • 200 gramos de espinacas frescas
          • 2 patatas grandes
          • 2 dientes de ajo
          • Puñado de piñones (unos 25 gramos)
          • Puñado de uvas pasas (unos 40 gramos), en mi caso pasas sultanas
          • Sal
          • Pimienta Negra Molida
          • Aceite de Oliva virgen Extra

          Preparación:

          Precalienta el horno a 180 grados, con calor arriba, abajo y aire. Pela las patatas, lávalas y córtalas en rodajas no demasiado finas pero tampoco muy gruesas. Sazónalas y repártelas sobre una bandeja de horno previamente untada con un poco de aceite, para que no se peguen. Procura que no queden amontonadas para que se hagan y se tuesten todas por igual. Pincélalas con aceite por encima, no demasiado, y hornéalas durante 25 minutos.
          Lava las espinacas y déjalas escurrir bien en un colador. Mientras, pela dos dientes de ajo y ponlos a dorar en una sartén con dos cucharadas de aceite. Cuando empiecen a tomar color añade los piñones y las pasas. Mantén al fuego un par de minutos removiendo con una cuchara de madera y, antes de que los piñones se tuesten, añade las espinacas troceadas, salpimienta y rehoga todo junto un par de minutos más removiendo de vez en cuando. Verás que las espinacas pierden mucho volumen al perder el agua que contiene. Cuando las veas blandas puedes retirar, antes de que pierdan ese color verde tan intenso.
          Ya estamos listos para emplatar. Si quieres ayúdate de un aro, aunque no es estrictamente necesario. Dispón una base de patatas dentro de los aros y retira éstos. Reparte encima las espinacas salteadas con los piñones y las pasas y listo para servir. Procura comerlo caliente.
          No queda nada mal, ¿verdad?... Y con una ayudante como esta mucho mejor. Me ha ayudado a repartir las patatas en la bandeja de horno, a echarles sal y a darles aceite con el pincel (esto es lo que más le ha gustado). Además, ha echado a la sartén los piñones y las pasas y ha removido las espinacas. ¡Toda una cocinera! Y así posa tan orgullosa de su plato...


          Apuntes:
          • Puedes hacerlo con patatas fritas si lo prefieres, aunque te quedará algo más aceitoso si no las escurres bien. Al horno quedan menos aceitosas y muy crujientes.
          • He aprovechado el horno para poner sobre la propia bandeja de las patatas un recipiente refractario con unas albóndigas de ternera y cerdo. Las he pincelado con aceite y las he horneado 15 minutos junto a las patatas, transcurridos los cuales les he dado la vuelta y he añadido la salsa de tomate, dejando cocinar los 10 minutos restantes que le quedaban a las patatas. Un segundo plato perfecto tras degustar estas milhojas.